El frío intenso, los cambios de temperatura y la calefacción son grandes enemigos de la hidratación. El resultado más inmediato de la piel en invierno es la sequedad que tiene como efectos secundarios tirantez o descamación, especialmente en las pieles más sensibles.

Joaquín Pinar, responsable en España de la firma suiza Wherteimar, nos recomienda ciertas pautas para conservar la salud del rostro durante toda la temporada.

¿Cuál es el mejor escudo de la piel contra el frío?
Ante este cambio de temperaturas, la piel sufre demasiados cambios térmicos, por lo que es recomendable en primer lugar, la utilización de cremas que dispongan de principios activos regeneradores, reparadores y protectores. Sobre esto último, debemos recordar que también en invierno, o cuando llega el frío, hay que aplicar sobre la piel el grado de protección solar que habitualmente usemos. No porque los rayos de sol actúen de manera distinta que en verano, se ha de bajar la guardia.

¿Qué cosméticos serían los mejores para pieles secas y sensibles al frío?
Básicamente, productos con texturas ricas, activos calmantes, regeneradores, protectores y antiinflamatorios son la mejor solución para este tipo de pieles. Nos ayudarán a eliminar la molesta sensación de tirantez e irritación.

¿Cuáles son los principales problemas cuando bajan las temperaturas?
Cuando esto ocurre, nuestra piel se contrae y disminuye su irrigación. La falta de oxígeno y otros nutrientes otorgan a la piel un tono apagado. También se produce una sensación de tirantez, impidiendo la secreción sebácea de nuestras glándulas y dejando la piel muy seca y sensibilizada. Especialmente ello incide en la zona de los labios, lateral de la nariz y las manos. Asimismo, un cambio de temperatura extrema durante un largo periodo de tiempo puede debilitar los capilares cutáneos. Si estos se debilitan, acabarán siendo más permeables, llegando incluso a provocar una cuperosis.

¿Qué tratamientos y cosméticos se recomiendan para combatirlo?
Lo que hay que hacer es mantener siempre la piel muy bien hidratada y por supuesto, aplicar un factor de protección alto, lo que calmará, protegerá y descongestionará nuestra piel. Por la mañana, proponemos la Crema Regeneradora de Alta Protección SPF 50, de textura no oleosa y de rápida absorción, enriquecida con aloe vera, ADN marino, extracto de gayuba (uva ursi), vitamina E y un cóctel de principios activos antiedad. Contiene un alto factor de protección UVA y UVB – SPF 50. En definitiva, protege el manto hidrolipídico de la piel y lo previene contra el envejecimiento cutáneo. Durante la noche, la Mascarilla Juventud Absoluta que nos ofrece unos activos ideales para esta problemática: néctar de rosa negra, aceite de rosa mosqueta, alantoína y aloe vera, entre otros. Finalmente, para las manos recomendamos el uso continuado de la Crema Energizante para manos SPF15, con una fórmula rica y no grasa que se absorbe inmediatamente para formar una barrera protectora a modo de guante contra la pérdida de humedad, recuperando la flexibilidad y suavidad de la piel.

Imágenes: @beccatappert.