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    ¿Rinoplastia ultrasónica?

    5 noviembre, 2020 Redacción

    La rinoplastia ultrasónica representa un gran avance que responde a las exigencias tanto de cirujanos como de pacientes que cada vez exigen resultados más precisos, más perfectos y naturales. Según el Doctor Ángel Martín: “Hoy, gracias a la rinoplastia ultrasónica, podemos conseguir resultados más perfectos y naturales que con la cirugía clásica, de manera más rápida y precisa y con un postoperatorio más confortable”.

    Ventajas respecto a la cirugía tradicional

    1. Mayor precisión: Los cortes son más exactos, se remodela de forma más precisa el hueso de la nariz, sin la posible aparición de fracturas incluso en huesos frágiles inestables.

    2. Menor traumatismo: gracias a la exactitud con la que se trabaja se producen menos edemas y menor inflamación, efectos secundarios que aparecen en la rinoplastia convencional y que son uno de sus principales inconvenientes.

    3. Resultados más perfectos y naturales: se consiguen rinoplastias con menos asimetrías e irregularidades, y se pueden corregir ciertos defectos como pueden ser las narices anchas a voluptuosas.

    4. Recuperación mucho más rápida: es uno de los aspectos que más valoran los pacientes. Al haber menos traumatismo, los pacientes se incorporan a su vida habitual en un plazo mucho más corto de tiempo.

    Ultrasonidos: una técnica sin apenas marcas visibles

    Los escoplos y martillos que se utilizan en las técnicas tradicionales se sustituyen por un terminal con forma de lápiz que emite ultrasonidos a una frecuencia específica para poder limar el hueso y también para romperlo de forma controlada, con el fin de estrechar el tabique nasal y conseguir así el resultado deseado. El dispositivo de ultrasonidos hace un limado mucho menos traumático y más preciso, llegando a ser incluso milimétrico por lo que no hay riesgo de dañar otras estructuras nasales como la mucosa, los músculos o los vasos sanguíneos, lo que se traduce en una recuperación más cómoda y rápida.

    ¿Quedan cicatrices? El único corte visible que se realiza en la zona de la columela (la que se encuentra entre los dos orificios nasales) es milimétrico, y a los dos o tres meses, es prácticamente imperceptible.

    Menos tiempo de recuperación

    La intervención dura más o menos unos 90 minutos y se realiza en quirófano con anestesia general. Tras la intervención se coloca una férula nasal que hay que llevar puesta durante una semana aproximadamente.

    El postoperatorio puede ser incómodo, pero no doloroso. Puede aparecer algún hematoma alrededor de los ojos, pero es menos frecuente que en una intervención tradicional y a la semana suelen estar resueltos, precisamente el momento en el que se retira la férula nasal. El paciente puede realizar vida normal, pero sin realizar grandes esfuerzos. Para practicar deporte intenso o esfuerzos físicos se debe esperar hasta cuatro semanas, y tampoco se deben utilizar gafas durante el primer mes.

    Los resultados

    Funcionalmente los resultados son mejores, y estéticamente son más perfectos y naturales gracias a la precisión de la técnica. Se aprecian a partir de las 4-6 semanas y son definitivos al año. En general, con la rinoplastia ultrasónica vamos a tener menos inflamación y menos hematomas, y por lo tanto una vuelta más rápida a la vida laboral. En ambos casos los tiempos de recuperación son similares, ya que la nariz tardará unos meses en alcanzar su forma definitiva final, pero el proceso de recuperación depende del tipo de trabajo que se haya realizado e incluso del tipo de piel que tenga nuestro paciente, por ejemplo, pieles más gruesas tardarán más en desinflamarse completamente que las pieles más finas.

    Indicaciones

    Cuando se desea mejorar su aspecto funcional porque no se respira bien, o cuando se quiere mejorar la estética de una nariz con caballete nasal, puntas poco definidas, caídas o gruesas, un dorso nasal ancho, o desviaciones del dorso o la punta de la nariz.

    La nariz culmina su crecimiento a los 15 años en las niñas y a los 16 en los niños. Todos los expertos coinciden en que es a partir de esa edad cuando está indicada la rinoplastia.

    La proporción ideal

    La nariz es el centro del rostro, no es la protagonista, pero sus proporciones contribuyen a embellecer los demás rasgos sobresalientes del rostro, los ojos y los labios.

    El doctor Ramón Saucedo explica que “mirando la cara de frente, la medida entre el entrecejo y la base de la nariz debe entrar tres veces en el largo de la cara (desde el nacimiento de la frente hasta el mentón). Si miramos el rostro de perfil el ancho de la base de la aleta nasal debe ser igual al ancho del ojo y tanto la frente, como la punta de la nariz como el mentón deben estar situados en la misma línea».

    Imágenes: D.R.

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