Los descuidos en vacaciones pueden poner en riesgo nuestra piel. Quedarse dormido al sol u olvidar reponer la crema solar con la frecuencia adecuada pueden desencadenar quemaduras. Lo mejor es evitarlas, pero ¿cómo actuar si el daño ya está hecho?

«Tras la exposición solar de la piel, uno de los primeros signos visibles del daño producido por los UVA y UVB es el enrojecimiento de la misma. Esto ocurre por la dilatación de los vasos sanguíneos en la dermis, lo que también produce inflamación y sudoración», indica Sandra Burgos, Directora de Formación de Clinique.

Dependiendo de la cantidad de exposición solar, este enrojecimiento aparece de 2 a 6 horas más tarde y estará peor de 12 a 24 horas después. Este es el motivo por el que la piel puede estar ligeramente enrojecida inmediatamente después de tomar el sol y, horas más tarde, verse muy roja y quemada.

La intensidad o grado de enrojecimiento es una buena indicación de la severidad del daño infligido por el sol. «Los síntomas más comunes que podemos ver en nuestra piel cuando la piel ha sufrido un exceso de sol, son cambio de color, sensación de calor en la zona afectada, y sensibilidad. Con el paso de los días podemos ver como “la piel se pela” en las zonas afectadas», añade Sandra

Estos efectos superficiales pasarán con el tiempo, pero hay que tener en cuenta el daño causado a las capas más internas de la piel y el envejecimiento prematuro que conlleva. Estas son las pautas para minimizarlos.

1. Refrescar la piel por dentro y por fuera, es clave.

2. Beber abundante agua nos ayudará a refrescar nuestro organismo y baja Sobre la piel, Moisture Surge 72hr repone al instante la hidratación perdida. Su contenido en Aloe, ayudará a calmar la irritación de la piel mientras sus antioxidantes luchan contra los radicales libres que dañan la pielr la temperatura.

3. No aplicar productos que contengan aceites, puesto que pueden obstruir la piel de forma que ralentiza la pérdida del calor provocado por la quemadura solar.

4. El enrojecimiento puede seguir aumentando durante 72 horas tras la exposición solar, por lo que la primera medida sería no exponerse al sol durante este tiempo y aplicar productos que calmen la piel y repongan la hidratación, como el bálsamo con aloe After Sun Rescue Balm With Aloe, que ayuda a calmar la piel, proporciona confort tras la exposición al sol y ayuda a prevenir los signos visibles de envejecimiento ocasionados por el daño solar.

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