A un día del fin de semana seleccionamos los tres destinos europeos que bien merecen una visita. Solo, en parejas o con amigos, las posibilidades de conocer estas ciudades son infinitas.

LISBOA

Pintorescos barrios, miradores, calles empinadas y, por supuesto, sus históricos tranvías, encierran el encanto y tradición de este destino imprescindible. La magia de Lisboa nos mantiene hechizados.

¿Por qué elegir la cuna del fado?

1. Puestas de sol. La Praça del Comercio nuevo punto clave. Frente al Tajo, este lugar de la ciudad se convierte en el mejor plan para despedir el día tanto de autóctonos como visitantes.
2. Elegancia y tradición. Un paseo por la ciudad te hará descubrir magnificos edificios, palacios y museos. Una oda a la arquitectura y tradición.
3. Paladares Gourmet. Lisboa es, sin duda, una seductora propuesta para el estómago. La alquimia que consiguen cocinando bacalao se convierte en un viaje de sabores que hacen cada plato del pescado algo diferente. Los amantes del café también están de enhorabuena. Desde el clásico Café A Brasileira hasta el vanguardista Kaffeehous hacen de la espirituosa bebida una delicia.
4. Espíritu bohemio. Cuna de intelectuales el espíritu tradicional inunda sus calles. Un lugar magnífico donde encontrar productos gourmet, moda y diseño en sus clásicos mercadillos. Atrás quedaron los tiempos de ir a Portugal a por toallas. El mercadillo LX Factory, Feira de Belem y Feira de Ladra, nuevos puntos de encuentro.
5. Un desconocido. Compartimos kilómetros de frontera, un pasado común y una historia similar, pero muchos son los que viven de espaldas a ellos.

BIARRITZ

El lujo clásico y snob que sacudió la ciudad hace más de 150 años se mezcla con la cultura urbana. Una simbiosis que convierte a Biarritz en destino predilecto de medio europa.

¿Por qué Biarritz?

1. Sus playas. Destino estrella entre surfistas, la costa francesa se perfila como la mezcla perfecta entre ocio y deporte. Buenas olas que hacen las delicias de todo amante del mar.
2. Comida con vistas. Chez Albert y Villa Belza dos de los lugares de visita obligada para todo comensal. Además de los platos típicos de la zona, podrás disfrutar de insuperables vistas al Atlántico.
3. En días de lluvia. Los posibilidades son infinitas en la ciudad. Pero nada mejor como organizar una ruta de compras por lo lugares más típicos. Punto obligado es la Chapelleria Divine. Una sombrerería donde el arte y la artesanía se respiran al cruzal el umbral de la puerta.
4. Dulce tentación. Patisseries Paries es la perdición para cualquier goloso. Una pastelería donde encontrar los típicos Mouchos (la versión local de los macarons). La más antigua de la ciudad y punto álgido para cualquier amante de los pequeños y cuidados detalles.
5. Culto al mar. Los aficionados de los festivales y el agua están de enhorabuena. En la ciudad se celebra todos los años una muestra de vídeos, música y diferentes actividades a la que se desplazan apasionados del deporte acuático de todo el mundo.

VIENA

La ciudad imperial por excelencia todavía conserva su aire decimonónico. Todo un referente intelectual a todos los niveles.

¿Por qué Viena?

1. Ciudad verde. Considerada por quinta vez consecutiva la cuidad con mayor calidad de vida, más de la mitad de su área urbana está constituida por espacios verdes.Un total de 2000 parques y jardines en los que pasear es todo un privilegio.
2. Sostenible. La ciudad de Viena cuenta con una de las mayores explotaciones agrícolas ecológicas de Austria. Más de 860 hectáreas de tierras de cultivo orgánico se administran en tres fincas de la ciudad. esde un cuidado corporal ecológico, pasando por tiendas de alimentación y de moda de comercio justo.
3. Tradición musical. La Ópera de Viena es, sin duda, una de sus visitas imprescindibles. Con gran tradición a su espalda es todo un símbolo de la ciudad.
4. Emblema deportivo. Caminar por el Wienerwald, correr por el Prater, patinar por la Isla del Danubio o nadar en una piscina con historia. Infinidad de posibilidades que se completan participando en la Vienna City Marathon. Una carrera que aglutina todos los años a deportistas y aficionados por este ejercicio.

Imágenes: D.R