Llega septiembre y la jornada laboral vuelve a prolongarse hasta las largas ocho horas o más. Si además eres de las que pasa la mayor parte de tu jornada sentada debes conocer algunos de los problemas que puede desencadenar pasar tanto tiempo en esta posición.

Es perjudicial para la circulación sanguínea y favorece la aparición de las varices. Además, más allá de la pesadez y de los problemas en las piernas, pasar tanto tiempo sentada y seguir una rutina de vida sedentaria puede ser un factor de riesgo, según la OMS.

Por ello, ahora que comienza de nuevo la rutina es importante que interiorices algunas prácticas que te ayuden a combatir las varices y a mantenerte activa como puedas. Asimismo, te proponemos una serie de recomendaciones para tratar de contrarrestar los efectos de permanecer tanto tiempo sentada.

1. En primer lugar, la alimentación es muy importante. Es probable que durante las vacaciones hayas cometido más de un exceso, por ello, ahora toca retomar hábitos de vida saludable y alimentarnos como debemos. Por ejemplo, debemos reducir considerablemente nuestro consumo de sal para favorecer la circulación sanguínea. Asimismo, debemos evitar las grasas saturadas como patatas fritas, embutidos, carnes rojas o bollería.

Existen otros alimentos beneficiosos que nos podrían ayudar. Por ejemplo, la cebolla contiene una gran cantidad de flavonoides. Ingerida regularmente ayuda a proteger las paredes de las venas. Por otro lado, los frutos rojos como los arándanos, las fresas y las frambuesas mejoran la circulación.

2. Mientras estés sentada en la oficina es importante que no cruces las piernas. Esta postura es perjudicial ya que se comprimen las venas, lo que dificulta el flujo natural de la sangre. Trata de recordarlo a diario: ponte un post-it o deja una nota en la agenda para recordarlo.

3. Mima tus piernas. Comienza y termina el día duchándolas. El contraste de temperaturas del agua ayudará a mejorar la elasticidad de las venas y a proporcionar una sensación de alivio ante el dolor o la pesadez. Alterna el agua fría y caliente pero finaliza siempre con agua fría para activar la circulación.

4. Haz pequeños paseos de puntillas. Camina dando pequeños pasitos hacia delante y hacia detrás, descalza. Después, marca el paso de manera exagerada durante un par de minutos apoyando bien la punta del pie.

5. Usa medias de compresión. Las medias de compresión aprietan más en la zona del tobillo y ayudan a disminuir la tensión a medida que la sangre se acerca a la rodilla. Ahora que todavía hace calor puedes optar por unas medias más ligeras y cambiarlas por las más compresivas a medida que se acerca el frío invierno.

6. Dales un masaje. Los masajes manuales son una excelente opción para favorecer el retorno venoso. Comienza con ambas manos empezando por los dedos de los pies y subiendo lentamente hasta la ingles tanto por delante como por detrás con movimientos circulares para aliviar la pesadez de las piernas.

7. Huye del sedentarismo. Hacer ejercicio activa la musculatura de las extremidades lo que ayuda al sistema venoso. Sin embargo, debes tratar de evitar los deportes de impacto como el running y optar por ejercicios más recomendables como andar en bici, nadar o caminar rápido.

8. Evita el alcohol y el tabaco. El tabaco tiene efectos negativos en las paredes venosas y en las arterias. El alcohol por su parte, reduce la elasticidad de las venas por lo que conviene que limites su consumo.

Toma nota de estas recomendaciones y trata de cuidar tus piernas teniendo en cuenta la cantidad de horas al día que pasas sentada.

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