Las imágenes sin filtros obtienen un 21% más de interacciones que las que todavía los llevan. ¿Eso implica descuidar la foto? No, porque el selfie sí sigue estando de moda y queremos salir con una piel perfecta. El secreto no está solo en el maquillaje o en las apps para mejorar la imagen… Nos lo cuenta el Dr. Cerrud, de la clínica estética Doctor Leo Cerrud.

Lo que ves no es lo que hay

“Hasta hace pocos años solo nos preocupábamos por lucir buena cara, buena piel y buen aspecto en los grandes acontecimientos de nuestra vida: bodas, bautizos y comuniones; pero con la aparición de los móviles, las redes y los selfies, nos convertimos en reyes del auto-retrato y en maestros de retoque y los filtros. Ahora, en una nueva vuelta de tuerca, los influencers han decidido que lo cool es poner aquello de sin filtros, lo que ves es lo que hay. Cierto que muchos siguen usando apps de camuflaje, pero no filtros; y todo tiene que estar impecable, porque para eso lo publicas. Esta tendencia genera una mayor demanda de tratamientos médico-estéticos que se dedican a mejorar la calidad de la piel y a producir ese efecto buena cara”, explica el Dr. Cerrud.

A prueba de primer plano

“Ese efecto buena cara implica que esté luminosa, impecable, sin imperfecciones y a prueba de close ups o primeros planos. Y por eso hoy en Medicina Estética los tratamientos más demandados son los que combaten las manchas, los poros, los brillos, eliminan el acné y sus marquitas e hidratan en profundidad”.

El selfie, arma de doble filo

“El selfie es un arma de doble filo y si no lo haces bien los resultados pueden ser nefastos. Dependiendo de la luz y el encuadre podemos salir favorecidos o convertirnos en una versión tergiversada de nosotros mismos. La distancia, el gesto y el enfoque tienen que hacerse de una forma específica para sacarse partido, pero sobre todo debemos fijarnos en la luz”.

Consejos para una foto perfecta

Según el experto, “el selfie es algo tan personal como el corte de pelo, el maquillaje o la ropa; sin embargo hay ciertas reglas que es mejor seguir”:

• Luz: En la medida de lo posible, que sea natural; si es artificial, mejor una difusa (que no provenga de un único foco), nunca una cenital o frontal desde arriba, porque acentúa las ojeras y marca las arrugas.

• Enfoque: Por encima levemente de la horizontal.

• Encuadre: Los encuadres ¾ no le quedan bien a todo el mundo y alargan o deforman la nariz.

• Maquillaje: Con o sin, depende del tipo de selfie. “Un truco consiste en aplicar puntos de luz como un corrector o iluminador por debajo de la cola de la ceja y por encima del principio, en las ojeras, a lo largo de la nariz, en la punta y en el arco de cupido”.

Imágenes: Instagram

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