Orgánica, local y de temporada. Son las bases de la dieta vikinga, un concepto desarrollado en 2004 por cocineros y nutricionistas daneses y que pretende desbancar a la mediterránea en la forma de comer saludable. Son varias las voces que hablan de esta como la dieta que triunfará en 2015, y apuntan a que incluso desbancará a la mediterránea.

Dejando a un lado las albóndigas suecas, los crackers y salsas preparadas que han alcanzado fama internacional a través de Ikea, el sustento principal de esta forma nórdica de comer son el aceite de canola (que contiene la menor cantidad de grasa saturada que cualquier otro tipo comestible), granos integrales, arándanos, pescado, algas y raíces.

Dried pears.

Una foto publicada por noma (@nomacph) el Oct 11, 2014 at 1:51 PDT

Como epítome de esta tendencia, se encuentra el galardonado restaurante Noma (elegido en cuatro ocasiones -la última en 2014- mejor restaurante del mundo). Sus fogones han popularizado la comida nórdica moderna en la que se basa esta dieta.

A continuación un decálogo para probar el estilo de comida vikingo.

1. Comer frutas y verduras a diario.
2. Consumir granos integrales.
3. Más productos marinos y de lagos.
4. Carne de alta calidad, en poca cantidad.
5. Más comida de escenarios salvajes.
6. Elegir alimentos orgánicos.
7. Evitar aditivos.
8. Ceñirse a alimentos de temporada.
9. Apostar por menús cocinados en casa.
10. Evitar deshechos.

El gobierno danés ha puesto en marcha un site en el que se comparten recetas y consejos sobre su particular fórmula nutritiva llamado idegryden.dk/sider/english

Imágenes: Instagram.