Atrás quedó la época en el que pasados los 25 a una modelo ya se le consideraba mayor para seguir en el negocio. Los límites se han borrado, respuesta de una población cada vez más envejecida que reclama perfiles más ajustados a su realidad.

Pues bien, Yazemeenah Rossi es la top de una generación. Tiene 60 años y es el fiel reflejo de que la belleza honesta y magnífica existe a cualquier edad. Aunque posee una genética envidiable, Rossi es el fiel reflejo de que una vida healthy puede derivar en una madurez fantástica.

De hecho la modelo francesa, afincada en Malibú, lanza toda una declaración de intenciones: «“Me gusta más el aspecto que tengo ahora, que el que tenía hace 20 años”, comentaba a la revista SModa.

Lleva trabajando justo desde esa edad y ha sido imagen para firmas como Yves Saint Laurent, Barney’s o Hermés. Sin embargo, la fama mundial le ha llegado cuarenta años después, y gracias a la red.

Imágenes: @yazemeenah.